Acciones y Criptomonedas con una tendencia a la baja en el 2022
Acciones y Criptomonedas con una tendencia a la baja en el 2022
El 2022 ha sido difícil para los inversores, con todas las principales clases de activos moviéndose a la baja al unísono. La razón subyacente por el mal rendimiento en los mercados financieros es el aumento de las tasas de interés, en un intento de frenar los elevados indicadores de inflación en Estados Unidos. En julio 2022 la inflación en Estados Unidos fue de 8.5% según el Índice de Precios al Consumidor, dicho porcentaje es un porcentaje elevado no visto desde la década de los 1980s. Como resultado, una cartera diversificada no ha logrado proteger a las inversiones de los riesgos actuales: aumento de las tasas de interés, inflación récord y la desaceleración del crecimiento económico.
Cuando la Reserva Federal eleva su tasa de interés de referencia, los bancos y los prestamistas también tienden a aumentar los costos de endeudamiento. Las hipotecas, las tarjetas de crédito y otras deudas se vuelven más costosas. Como resultado, se reduce el gasto y la demanda de los consumidores, por su parte las empresas también pagan más para financiar sus operaciones. Con el aumento de las tasas de interés otras inversiones más seguras como los bonos o el oro, se vuelven más atractivas en relación con las acciones. El aumento de los precios de petróleo debido a la guerra de Rusia con Ucrania ha provocado restricciones en el suministro y un aumento de los precios del gas y petróleo. Commodities como el café y la azúcar también han aumentado en el transcurso del 2022, sin embargo, recientemente el precio del petróleo y de productos agrícolas como el trigo ha bajado considerablemente. Por ejemplo, el precio del barril de petróleo ya es de inferior a los 90 dólares el barril en el mes de septiembre del 2022, a principios del 2022 el precio había superado los US$125 por barril. Por lo que todo pareciera que la inflación llegó a su pico a mediados del 2022 y habrá una caída en los índices inflacionarios en Estados Unidos y en América Latina. Cabe destacar que en Europa la inflación seguirá elevada debido a la fuerte dependencia en el gas proveniente de Rusia en el invierno en el continente europeo.